Estaban todos en la sala 9 del piso 18 de las oficinas de Santiago. Iván Arriagada, Presidente Ejecutivo, Ana María Rabagliati, vicepresidenta de Recursos Humanos y Carlos Espinoza, Gerente General de Centinela, se encontraban en el set con todas las medidas preventivas, sentados en mesas diferentes y a dos metros de distancia.

"Bienvenidos a una nueva versión de Diálogos sobre el futuro. Un espacio donde periódicamente estamos abordando temas muy relevantes para el Grupo Minero", explicó Cristina González, conductora del evento que se transmitió en vivo por Teams y que reunió a casi 500 personas.

Luego, la periodista explicó que en esta oportunidad se abordarían las Nuevas Formas de Trabajar, un proyecto estratégico para Antofagasta Minerales en el cual se está trabajando desde el año pasado.

"Partimos con esta iniciativa como una respuesta a la contingencia y con el fin de resguardar la salud de todos, de gestionar la disminución de aforo y buscar la continuidad operacional. Sin embargo, en el camino nos dimos cuenta que había una oportunidad distinta, de hacer algo más permanente y sostenible", dijo Ana María Rabagliati. 

Las Nuevas Formas de Trabar tienen tres objetivos: aumentar la adaptabilidad y flexibilidad de la organización, mejorar la conciliación entre la vida personal, familiar y laboral, además de aumentar la efectividad y productividad.

"Esto no es sólo un sistema de turnos, es un modelo que nos permite trabajar de forma distinta. Para eso, debemos adquirir nuevas prácticas y dinámicas, una cultura y un liderazgo diferente. Estamos transitando hacia instalar de manera sostenible este nuevo modelo", agregó la vicepresidenta de Recursos Humanos.

En tanto, Iván Arriagada, aseguró que con esto nos estamos preparando para los desafíos del futuro. Además, comentó que "en la medida que hemos ido avanzando, nos hemos dado cuenta de que hay matices. Es importante mantener la afiliación con la Compañía, con nuestra cultura, con nuestros valores. Por eso, nada reemplaza el trabajo presencial y en terreno". 

Además, insistió en la importancia de lograr una mayor conciliación entre la vida personal y laboral: "Tenemos que ser más efectivos y productivos siempre y cuando esto se traslade a mejorar nuestra calidad de vida. Sin embargo, aún hay una sensación de fatiga y sobrecarga, por lo que no estamos en el nivel que quisiéramos. Hay que mejorar las dinámicas de trabajo: tener reuniones más eficientes, asegurarnos que vaya la gente tiene que asistir, bloquear espacios, etc.".

Carlos Espinoza, se refirió a cómo las Nuevas Formas de Trabajar se están implementando en las compañías, específicamente en Centinela. "Lo que partió en la contingencia como una necesidad, hoy es una oportunidad. No sólo para una mayor productividad, sino también en el ámbito de la conciliación. Vemos que hay espacios y se ha logrado eso en las faenas", aseguró. "El desafío más que técnico, es 100% adaptativo. Estamos involucrando a las personas, buscando las formas para que cada uno pueda aportar con su experiencia, dándoles herramientas y buscando un máximo común que nos permita tener una mejor operación", añadió.

En este contexto, el Gerente General indagó en proyectos claves que cambiarán la forma en la que se realiza minería: la Gestión Integrada de Operaciones (GIO), en conjunto con la autonomía de camiones en las operaciones. Iniciativas que son parte de la ruta digital y centrales para el crecimiento de Centinela.

El rol del líder

El liderazgo siempre ha sido el principal habilitador de la cultura, precursor de los cambios y motor del desarrollo de los equipos. Y en tiempos de pandemia, esto ha cobrado aún más relevancia. Así lo explicó en el conversatorio Ana María Rabagliati: "El Sello de Liderazgo nos permite generar ese sentido sentido de pertenencia. Al tener menos instancias presenciales, mantener ese sentido de orgullo y de afiliación es un desafío. Por eso, las competencias del Sello apuntan precisamente a encarar este nuevo modelo".

Asimismo, expresó que "necesitamos tener líderes que inspiren, que movilicen, que se conecten con sus equipos, que actúen con convicción, que permitan desplegar nuestro máximo potencial, que se preocupen de su propio desarrollo y el de nuestros equipos. Que generen instancias de retroalimentación permanente, den más autonomía, miren hacia el futuro, que tengan un liderazgo empático, inclusivo y valoren todos los aportes. De esta manera, nuestro Sello de Liderazgo es el principal movilizador de estas nuevas dinámicas y cultura que necesitamos instaurar", finalizó.