Manuel Medina se conecta a una reunión por Teams todas las semanas. El supervisor Servicios Mina prende su cámara y saluda a los demás integrantes de un grupo que quiere cambiar el mundo: el equipo motor del Programa de Voluntariado de Minera Los Pelambres. Así, comienzan a comentar los avances del proyecto que implementarán en su compañía.

"Como equipo nos toca materializar la propuesta que fue seleccionada en el Café de Las Ideas, donde se evaluaron todas las opciones que los trabajadores levantaron. En nuestro caso el consenso apuntó hacía el apoyo en educación a niños, niñas y adolescentes de las comunidades aledañas a la faena. A partir de ello, nos reunimos con los distintos involucrados y fuimos construyendo y consolidando esta propuesta", explica Manuel Medina.

En las reuniones del equipo que lidera Manuel, también participa la Fundación Minera Los Pelambres y el Departamento de Administración de Educación Municipal de Salamanca, con quienes se tomó la decisión de comenzar este voluntariado en el Liceo Polivalente de la comuna.

Tal como Manuel, María Eugenia de Antofagasta Minerals, Leonardo de Centinela y Marcos de Zaldívar, junto a más personas, forman parte de los distintos equipos motores conformados en cada compañía. Grupos que se crearon con el objetivo de compartir experiencias, definir expectativas y afinar los detalles de los proyectos pilotos de voluntariado que se van a implementar en cada minera. Esto, para finalmente poder llevar a cabo iniciativas que ayuden a quienes más lo necesitan.

"Me motiva nuestro propósito  de Desarrollar minería para un futuro mejor, porque creo que es más profundo que el sólo hecho de producir cobre. Siento que tenemos el deber de que nuestro país sea mejor para todos, como una manera de trascender más allá de nuestra propia realidad, contribuyendo a la sociedad y comunidades que nos rodean generando impactos positivos", asegura María Eugenia Soto, analista de Bienestar de Antofagasta Minerals.

Para Leonardo Román, gerente Servicios de Soporte a la Operación de Centinela, "el voluntariado me ha motivado desde siempre, sentir que puedes apoyar a los demás es algo que tengo muy arraigado". Por eso, decidió formar parte del equipo motor de su compañía y desde ahí, tratar de ser un agente de cambio. "El objetivo es poder construir el proyecto de ayuda social que queremos llevar adelante y definir qué, cómo y cuándo lo queremos realizar. Así, también definiremos los alcances de las iniciativas y el apoyo que requeriremos de quienes se quieran integrar".

Por su parte, Marco Cortés, operador Mina de Zaldívar, realiza voluntariados desde hace cinco años. Participa en Acción Solidaria, un grupo de apoyo social organizado por integrantes de la Compañía, que colabora con niños de escasos recursos y personas de tercera edad, entre otros. Hoy, también es líder del equipo motor de Zaldívar.

"Los invito a formar parte de estas iniciativas, no sólo a los trabajadores, sino también a sus familias. Una vez que estén ahí, se darán cuenta de lo gratificante que es ayudar y extender la mano a alguien que lo necesita. Sentirse con el corazón lleno en cada abrazo, alegría o sonrisa es algo impagable", finaliza.