07-08-2023
El equipo está operando actualmente en completa normalidad gracias al procedimiento realizado de forma colaborativa y segura.
A dos meses de su mantención, el espesador de Minera Los Pelambres opera con normalidad. Un proceso que, debido a su complejidad, dejó aprendizajes y buenas prácticas.
David Rosales, superintendente de Ejecución de Mantenimiento, subraya que "fue un trabajo seguro, no tuvimos accidentes. También destaco el trabajo en equipo y cómo la organización se movilizó para realizar estos trabajos de emergencia, con apoyo de diferentes áreas, para cumplir con el foco de normalizar el espesador".
"Sin duda el liderazgo, la comunicación y la toma de decisiones de cada uno de los supervisores de mantenimiento 7x7, nos permitió dar avance seguro a las actividades definidas en carta Gantt", comenta César Vásquez Aravena, ingeniero senior de Mantenimiento de TFT.
El espesador está compuesto básicamente de dos partes, una torre central donde se ubica el mecanismo de giro y elevación de rastras, y una estructura para contener el material que es capaz de recibir 3.800 tph con un diámetro de 140 metros aproximadamente.
Uno de los primeros hitos de este proceso fue haber sido capaces de coordinar 241 personas de cuatro empresas contratistas y diez trabajadores de la CompañÃa. Las actividades se realizaron en corto tiempo y sin incidentes de seguridad.
Fueron dos meses de trabajo, en los que se realizaron maniobras únicas en la historia del espesador, como el ingreso de una grúa de 75 toneladas al interior del equipo. Esto permitió acelerar las tareas de armado de los componentes.
"Fue la primera vez que ingresa una grúa para realizar un trabajo de esa magnitud, rompiendo paradigmas y aplicando todos los controles que una operación asà requerÃa como, por ejemplo, insertando almohadillas certificadas con pendientes para asegurar su estabilidad", relata Miguel del RÃo, planificador del área de Mantenimiento.
Esta intervención en el espesador permitió además mejorar el sistema de elevación de las rastras para evitar que queden trancadas en la parte sólida del material que se deposita en el espesador.
Gracias a acciones de este tipo, realizadas con extrema precaución y seguridad, se llegó a la fecha en la que se entregó nuevamente para el funcionamiento este importante equipo, operando actualmente en completa normalidad.